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1993 - Insanity And Genius



"INSANITY AND GENIUS":





Release Date: 28.06.1993
Recorded at: Hansen Studios Hamburg
Engineered & produced by: Dirk Schlächter & Kai Hansen
Mixed at: Horus Sound Studio Hannover
Mixed by: Charlie Bauerfeind
Cover Artwork by: Kai Karczewski
Running Time: 56:27


Tracks:





Song:
              Music by:
Lyrics by:
Time:
              Hansen, Rubach
Hansen
5:04
              Hansen
Hansen
4:06
                    Hansen
Hansen
4:28
              Hansen
Hansen
6:51
              Hansen
Hansen, Scheepers
4:07
              Frenzel
Frenzel
5:20
              Rubach
Nack
4:30
        Scheepers, Schlächter
Scheepers
5:23
              Schlächter
Schlächter
3:52
              Schlächter
Hansen, Schlächter
7:32
Schlächter, Scheepers, Hansen
Scheepers, Hansen
5:14
Hansen, Scheepers, Schlächter, Wessel
Hansen, Wessel





Miembros De La Banda





  •  Tercera entrega de los alemanes Gamma Ray, la última en que Ralf Scheepers carga con la labor  vocal. En términos de formación, permanece desde el disco anterior Dirk Schlächter en guitarras  (aunque posteriormente se convertiría en bajista y en ese puesto permanece hasta el día de hoy) y  Thomas Nack reemplaza a Uli Kusch (quien posteriormente trabajaría en Helloween y Masterplan) en  la batería.

  •  En continuo desarrollo durante la primera mitad de los noventa, en éste disco los Ray de Scheepers  continúan en su estilo Power Metal con algunas pinceladas bastante oscuras de Heavy, un carácter  que establecería su predecesor Sigh No More. Las voces de Ralf son de las mejores que haya  grabado jamás y las guitarras de Hansen y Schlächter dan cátedra a todo momento. La base rítmica  sin duda cumple bien pero prefiero a Schläcter en bajo y Nack está lejos del virtuoso Kusch, es  inevitable imaginar cómo ganaría la batería del disco con Uli o incluso con el actual Dan Zimmerman  en baquetas.

  •  Last Before The Storm. Nadie me negará que cuando Kai tiene un buen día, se puede sacar de la  manga obras maestras.  

  •  El tema título captura (cómo no) el espíritu Priest al que el grupo es tan afecto. Es en verdad una  amalgama genial del “sonido Painkiller”, power y speed ochentero, lleno de guitarras oscuras y un  Scheepers dejándose la piel en una interpretación brutal que demuestra por enésima vez que puede  medirse con los grandes del género. El estribillo es sencillamente épico con ese teclado duplicando la  melodía vocal y los demás instrumentos a todo trapo.